“He ordenado a nuestra embajadora en Egipto averiguar cuántos colombianos murieron, se habla sin confirmar de 40. Veremos si logramos el retorno de sus cuerpos”, escribió Petro en su cuenta de la red social X, a propósito de notas de agencias internacionales que dan cuenta del suceso.

Sobre el hecho comentó la televisión oficial de Sudán, al informar que el Ejército de ese país derribó una aeronave supuestamente de origen emiratí cuando iba hacia el aeropuerto de Nyala, capital del estado de Darfur Sur, zona controlada por el grupo Fuerzas de Apoyo Rápido.

De acuerdo con el reporte, al menos 40 colombianos contratados como mercenarios viajarían en el avión.

En su pronunciamiento, el mandatario añadió que solicitó mensaje de urgencia para el proyecto de ley que prohíbe el mercenarismo y que cursa en el Congreso.

“Es también una trata de hombres convertidos en mercancías para matar. Tanta guerra quisieron dentro de Colombia, que al debilitarse la guerra en el país, la buscan fuera, donde nadie nos ha hecho daño”, opinó sobre el flagelo.

La Comisión Segunda de la Cámara de Representantes aprobó en primer debate en mayo pasado el proyecto de ley que ratifica la Convención Internacional contra el Reclutamiento, la Utilización, la Financiación y el Entrenamiento de Mercenarios, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 4 de diciembre de 1989.

Como parte de ese debate, varios representantes hicieron referencia a casos recientes en los que ciudadanos colombianos han sido vinculados a operaciones en el extranjero, en ocasiones sin la regulación ni el control del Estado.

El mentado proyecto de ley se radicó por la Cancillería después de varios casos divulgados por la prensa local acerca de colombianos que aceptaron el ofrecimiento de Ucrania para participar como efectivos en el conflicto con Rusia y que buscaban sin éxito retornar a su país.

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