Según el ministro de Energía y Minas, Salvador Mansell, citado por el boletín Informe Pastrán, el programa busca atender el aumento en la demanda por el crecimiento de viviendas, el desarrollo industrial y agroindustrial, y la modernización de redes eléctricas en barrios con más de 40 años de antigüedad.
“Las líneas construidas hace 40 o 50 años las estamos sustituyendo, mejorando la eficiencia energética y el suministro para la población”, destacó.
Además, se destinan 100 millones de dólares a proyectos clave del sistema interconectado nacional, que transporta energía a los centros de carga.
Resaltó entre las iniciativas la subestación eléctrica en Corinto, la cual está diseñada para soportar la ampliación del puerto, un centro logístico y el desarrollo de la ciudad costanera.
Además, la subestación en Bluefields, con una inversión de 21 millones de dólares, para fortalecer el suministro en la Región Autónoma de la costa Caribe Sur.
También se conoció sobre otros proyectos en La Gateada Esperanza y Tortuguero, con 24 y 25 millones de dólares, respectivamente, para modernizar la infraestructura energética en esas zonas.
El titular hizo referencia a la modernización del Centro Nacional de Despacho de Carga, el cual permitirá una mejor gestión de las nuevas plantas, líneas de transmisión y redes incorporadas. Asimismo, avanzan en el cambio de la matriz de generación energética, promoviendo un sistema más sostenible.
“Estos proyectos reflejan el sólido crecimiento y dinamismo del sector eléctrico y minero en Nicaragua”, manifestó el ministro.
Datos oficiales indican que el Gobierno sandinista impulsa inversiones en el sector eléctrico que superan los mil 200 millones de dólares en energía limpia para alcanzar el 80 por ciento de recursos renovables en la generación eléctrica y contar con una capacidad superior a los dos mil megavatios.
De ese modo, Nicaragua se ubica a nivel latinoamericano como uno de los pocos países en generación con más del 70 por ciento de recursos no fósiles, destacó la fuente.
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