El nuevo formato, que tendrá una vigencia de cuatro años, tendrá igual validez legal que la cédula física, pero con ventajas asociadas a la portabilidad, seguridad informática y facilidad de uso, añadió el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
Los ciudadanos podrán obtener la flamante IDC solo con la presentación de una cédula vigente, junto a un dispositivo móvil, y la comprobación de no tener ningún documento de identidad pendiente de retiro.
El trámite –precisó la autoridad electoral- podrá realizarse en línea desde el día del lanzamiento del servicio, a partir del sitio web oficial, donde estará habilitada una sección exclusiva para la solicitud, aunque el proceso estará disponible las 24 horas del día y los siete días de la semana, desde cualquier parte del mundo.
La gestión inicial de un interesado exigirá la identificación obligatoria mediante el número de cédula, pasar por un proceso de verificación biométrica y proporcionar un correo electrónico válido.
Los datos biométricos del solicitante usados para este servicio –confirmó el TSE- estarán debidamente protegidos y fueron recabados durante el último trámite de emisión de la cédula física.
La primera solicitud de cédula requerirá que la persona interesada obtenga el documento físico antes de iniciar la gestión.
Especialistas de la autoridad electoral citan entre las ventajas de la IDC su mayor accesibilidad y conveniencia, al portarla en dispositivos móviles; el uso de estándares internacionales para validar la identidad dentro y fuera del país; y la garantía de un cifrado avanzado y mecanismos de seguridad para evitar fraudes o suplantaciones.
arc/apb





