El Consejo del PP reafirmó su compromiso de promover los intereses nacionales mediante una diplomacia amplia, esfuerzos de paz sostenidos y desarrollo socioeconómico acelerado, durante una reunión ordinaria celebrada del 6 al 8 de agosto.

Destacó los notables progresos realizados por el país en los últimos siete años, atribuyendo reformas políticas, institucionales y macroeconómicas sólidas para reducir las vulnerabilidades internas y transformar los desafíos en fuentes de fortaleza.

Un elemento central del avance estratégico son las acciones asertivas y lícitas con respecto a las aguas del Nilo, que mejoraron considerablemente la posición geoestratégica de Addis Abeba en la región del Cuerno de África.

Reconoció además del éxito de elevar el derecho histórico y natural a acceder al mar en la agenda internacional, con múltiples pasos concretos para restaurar su posición legítima a lo largo del Mar Rojo.
El Consejo hizo hincapié en que las reformas políticas, sociales y económicas avanzaban de manera eficaz, sin dejar de lado las presiones internas y externas. La normativa remodeló el panorama político al reforzar la unidad y fomentar la prosperidad arraigada en la cohesión nacional en lugar de la política de identidad divisiva.
Para contrarrestar las amenazas en curso, el Consejo del PP esbozó una estrategia amplia encaminada a garantizar la paz, la buena gobernanza, la transparencia, los esfuerzos de lucha contra la corrupción, el desarrollo económico y la protección diplomática de los intereses nacionales.
Una vez más, reiteró la búsqueda de todas las vías pacíficas para poner fin a los conflictos, prometiendo apoyo a los militantes dispuestos a aceptar la paz. Simultáneamente, se comprometió a hacer cumplir la ley de manera decisiva contra quienes rechazan la paz y amenazan la seguridad y la propiedad públicas.
Los participantes reconocieron la importancia de atender las demandas públicas de buena gobernanza, justicia y oportunidades económicas a todos los niveles, lo que prometía una respuesta eficaz a las preocupaciones de los ciudadanos.
Asimismo, la necesidad de proporcionar información oportuna y precisa al público y exponer enérgicamente la desinformación destinada a fomentar los disturbios.
Erradicar la corrupción y los abusos administrativos al procesar a las personas responsables de los incumplimientos disciplinarios y la falta de conducta dentro de las instituciones fue otro de los compromisos planteados.
Reconoció la necesidad de identificar y abordar rápidamente las quejas públicas, la lucha contra la injerencia interna y externa, la corrupción y el populismo divisivo que amenazan la estabilidad económica y social de la nación.
De cara al futuro, la agrupación política trabajará en promover el desarrollo económico de Etiopía, intensificando las iniciativas en los sectores de la agricultura, la industria manufacturera, el turismo, la minería y la tecnología de la información, garantizando una transformación inclusiva con la participación activa del público.
En preparación para las próximas séptimas elecciones nacionales, expresó su determinación de lograr que el proceso sea democrático, lícito, caracterizado por una participación amplia y genuina.
El Consejo también destacó la importancia del patriotismo digital para contrarrestar la propaganda hostil y apoyar las narrativas nacionales constructivas.
A modo de conclusión, afirmó su firme determinación de lograr una victoria duradera, definida no sólo como la superación de los adversarios, sino también como la garantía de una paz, unidad y desarrollo sostenibles que beneficien a las generaciones presentes y futuras de etíopes.
jha/nmr





