En un comunicado oficial emitido el domingo, el gobierno venezolano lamentó la muerte de los periodistas Anas Al-Sharif y Mohamad Qreiqaa, los fotógrafos Ibrahim Dhahir y Moamen Aliwa, y el conductor Mohamad Noufal, según el reporte de la Agencia Venezolana de Noticias.

El texto expresa solidaridad con los familiares de las víctimas y el medio de prensa, y con todos los comunicadores que «arriesgan su vida para romper el cerco mediático y mostrar al mundo el genocidio que el régimen israelí comente contra el pueblo palestino».

De acuerdo con el pronunciamiento, el ataque a los periodistas forma parte de una estrategia de Israel para silenciar la prensa y ocultar las crímenes, que viola el Derecho Internacional Humanitario y las normas que protegen a los comunicadores en zonas de conflicto.

Igualmente, Caracas reiteró su respaldo a la causa palestina y llamó a la comunidad internacional y a los organismos de justicia a actuar con firmeza para detener la masacre, investigar los hechos y sancionar a los responsables.

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