La caravana, cargada con alimentos y artículos de primera necesidad, atravesó el puente de Namir, en la vecina provincia de Deraa, con destino a las zonas más afectadas de Sweida. Su traslado se realizó bajo la supervisión de la (MLRS), en coordinación con organismos estatales y locales.

De acuerdo con la organización, la asistencia cubre parte de las necesidades más urgentes de la población, aunque todavía resulta insuficiente frente al deterioro humanitario que enfrenta el territorio.

El jefe de prensa de la Media Luna Roja, Omar Al-Maliki, advirtió recientemente que las necesidades de la gobernación no admiten demora, en particular las relacionadas con la alimentación, el agua y la atención sanitaria.

En las últimas semanas, Sweida experimentó un serio deterioro de la situación humanitaria, consecuencia de los choques armados entre tribus y facciones locales, la intervención de fuerzas gubernamentales y los bombardeos israelíes.

Estos hechos provocaron escasez de harina, combustibles y alimentos, así como el colapso parcial del Hospital Nacional debido a los daños sufridos en las instalaciones y a la falta de insumos médicos.

Tras la relativa calma en los últimos días, las autoridades sirias, en coordinación con la Media Luna Roja y organismos internacionales, enviaron convoyes de asistencia destinados a paliar la crisis.

Los cargamentos incluyeron harina, productos alimenticios, medicinas y combustible para mantener en funcionamiento los servicios básicos.

Con anterioridad este sábado, miles de sirios se congregaron en la emblemática plaza Al-Karama, en el centro de Sweida, cabecera de la provincia sureña del mismo nombre, en una manifestación bajo el lema “El derecho a la autodeterminación”.

La masiva concentración se realiza en medio de una división social y en un contexto de debate nacional sobre la descentralización y las iniciativas de reconciliación.

En las imágenes difundidas en las redes sociales, se observaron banderas drusas e israelíes, en medio de ausencia de la bandera nacional.

Los participantes levantaron carteles con frases que denuncian las violaciones cometidas en la provincia, además de carteles con frases críticas al actual gobierno sirio.

La protesta se produce después de la violencia desatada en esa gobernación a mediados de julio pasado, en la que al menos mil 600 personas murieron en choques entre milicias locales drusas y grupo armados tribales.

Asimismo, se documentaron crímenes contra civiles, incluidas ejecuciones, quema de casas y secuestros.

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