“Hoy más que nunca reafirmamos nuestro compromiso con las familias hondureñas amparadas por el TPS”, expresó la mandataria en un mensaje en su cuenta de la red social X.
Castro aludió al fallo emitido la víspera por un tribunal federal de apelaciones a favor del gobierno del presidente Donald Trump, que el pasado 7 de julio rescindió ese beneficio migratorio para unos 50 mil hondureños radicados en territorio norteamericano desde hace más de 25 años.
En su publicación, la jefa de Estado afirmó que esa decisión judicial no borra los aportes de sus compatriotas “ni debilita nuestra convicción: seguiremos acompañando su lucha por estabilidad, dignidad y justicia”, enfatizó.
Informó que los consulados de la nación centroamericana en Estados Unidos brindarán orientación legal inicial gratuita, citas expeditas y “atención digna y respetuosa para toda nuestra comunidad tepesiana”.
La resolución judicial, adoptada el miércoles por un panel del Noveno Circuito de Apelaciones en California, implica que los favorecidos por el TPS perderán su estatus legal y autorización de trabajo el próximo 8 de septiembre.
De esa manera, suspendió el veredicto de una corte inferior que el 31 de julio último impidió a la administración estadounidense rescindir las protecciones a miles de inmigrantes indocumentados para vivir y trabajar legalmente en el país norteño.
Al argumentar la revocación del TPS, el Departamento de Seguridad Nacional norteamericano sostuvo que “ya no se justifican” las condiciones que originaron este programa a finales de la década de 1990 del pasado siglo, tras el devastador huracán Mitch en 1998.
Las circunstancias que en su momento motivaron el TPS son inexistentes en la actualidad, argumentó Washington, y citó el mejoramiento de numerosos indicadores sociales y económicos en esta nación centroamericana.
El ejecutivo de Castro prometió entonces garantizar una salida migratoria digna y definitiva para quienes han contribuido durante décadas a la economía y sociedad estadounidense.
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