Medios de prensa como Radio Okapi, Africanews y Actualité. CD dieron cuenta de la vuelta a las conversaciones, de acuerdo con fuentes cercanas a la organización de los diálogos, que refirieron la llegada de las partes a la capital qatarí la víspera.
La composición de la delegación gubernamental aún no fue divulgada, pero los representantes de la AFC/M23 son fundamentalmente expertos técnicos.
El pasado 19 de agosto el coordinador adjunto de los rebeldes, Bertrand Bisimwa, había anunciado que un equipo técnico viajaría a Qatar para examinar las propuestas para alto el fuego y la liberación de prisioneros en RDC.
No obstante, además de informar sobre la decisión, reiteró el comunicado de la AFC/M23 publicado el domingo, donde afirmaron que las negociaciones con el Gobierno congoleño sólo continuarán con la plena implementación de lo estipulado en la Declaración de Principios firmada el 19 de julio.
La ausencia de las delegaciones al encuentro que estaba previsto el 8 de agosto, debido a la no implementación de las medidas de confianza previstas en el documento, y el fallo en el plazo para la firma de un acuerdo definitivo, establecido el 18 de agosto, mantenían escépticos a muchos sobre el destino de los diálogos.
A esto se suma la intensificación de los combates sobre el terreno, especialmente en las provincias de Kivu Norte y Kivu Sur.
Desde el 20 de agosto, la ciudad de Kahumiro, ubicada en la zona del Parque Nacional de Virunga, cerca de Kibirizi, en el territorio de Rutshuru, provincia de Kivu Norte, ha sido escenario de violentos enfrentamientos entre las AFC/M23, combatientes de Wazalendo y presuntos elementos de las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda.
El ejército congoleño denunció el pasado 19 de agosto una serie de ataques de los rebeldes contra sus posiciones en el este congoleño, a los cuales consideró como una flagrante violación de los Acuerdos de Paz firmados en Washington con Ruanda, y de la Declaración de Principios de Doha.
También las AFC/M23 hicieron públicos supuestas acciones de las Fuerzas Armadas de RDC contra comunidades civiles.
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