«Raíces y voces ancestrales de los congos: memoria viva, resistencia heredada y patrimonios inmateriales en movimiento», es el tema central de esta sexta edición, incluido en el programa del XVII Festival Internacional de la Rumba Timbalaye 2025, que se celebrará en diferentes provincias cubanas hasta el próximo 31 de agosto.

En su intervención, Ulises Mora, fundador y presidente del Festival, destacó el papel fundamental de Timbalaye como promotor internacional de la cultura cubana y su importancia en la difusión del legado ancestral de la nación.

Los saberes ancestrales desempeñan un lugar esencial en la enseñanza y aprendizaje de la historia, pues permiten preservar la memoria colectiva, fomentar, el pensamiento crítico, valorar la diversidad cultural y fortalecer la identidad y el sentido de pertenencia, apuntó Mora.

La inauguración, en la Sala Manuel Galich de Casa de las Américas, contó con dos momentos, la conferencia del maestro Miguel Barnet sobre los cultos congos y la presentación del Grupo Folclórico Madre de Agua.

Durante su conferencia, Barnet reconoció que a pesar de ser un patrimonio de la nación cubana, no hay un conocimiento profundo de la presencia africana en Cuba.

Fue un desafío para mí cumplir con la invitación de Casa de las Américas porque los cultos congos fueron tan diversos que es casi imposible desclasificarlos; es una religión o un culto en el que es muy complejo penetrar, más dispersos, heterogéneos -no desorganizados- y más difíciles de interpretar,señaló el estudioso de las raíces africanas en Cuba a su audiencia.

Comentó sobre diferentes elementos de la historia africana, la espiritualidad, la religión, los grupos sociales, la esclavitud y la conexión con Cuba, ahondando en la riqueza cultural heredada gracias al imaginario africano.

A partir de un ensayo de su autoría aun en desarrollo, el intelectual cubano ahondó en la riqueza cultural heredada gracias al imaginario africano.

También criticó el matiz paternalista hacia los esclavos africanos presente en algunos textos, las generalizaciones arbitrarias sobre los congos y las categorizaciones burguesas, que afecta el entendimiento, percepción y estudio de este y otros cultos.

Algún día la Unesco (Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) tendrá que declarar como Patrimonio de la Humanidad todo este legado cultural africano tan rico, finalizó Barnet, quien invitó a leer, conocer y estudiar con mayor rigor la historia africana.

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