De acuerdo con el informe oficial, los ingresos corrientes sumaron tres mil 911 millones de dólares cuando el objetivo era recaudar cuatro mil 786 millones.

Es decir, según el reporte, entre enero y junio se recaudaron 875 millones de dólares menos de lo programado, lo que equivale a un incumplimiento de la meta del 18.3 por ciento.

Esto ocurre a pesar de que los ingresos crecieron 384 millones de dólares , es decir, 10.9 por ciento más que en el mismo período de 2024.

Para algunos analistas, el resultado llega justo en el momento en que el Gobierno presenta a la Asamblea Nacional (parlamento) el proyecto de presupuesto de 2026, cifrado en 34 mil 901 millones de dólares-el más alto de la historia del país-, que equivale a un aumento de cuatro mil 789 millones de dólares en relación con el de 2025.

Se trata, que mientras los ingresos no alcanzan, el gasto público proyectado no deja de crecer, lo cual será eje de los debates parlamentarios, señalan.

Para el economista Ernesto Bazán, citado por el diario La Estrella de Panamá, uno de los “graves inconvenientes” en la elaboración del presupuesto de la nación es precisamente la sobreestimación de los ingresos, en especial los ingresos tributarios.

Otros expertos advierten que el mismo escenario podría repetirse en 2026, cuando el fuerte aumento proyectado de gasto se enfrenta a una economía que no logra sostener el nivel de recaudación de ingresos requerido.

La data acumulada del primer semestre lo confirma: los ingresos tributarios sumaron tres mil 147 millones de dólares, mientras lo presupuestado para todo el año es ocho mil 240 millones.

Esa meta, advierte, difícilmente podrá cumplirse y terminará cubriéndose con más deuda pública.

Bazán alertó que para el próximo año, el Ejecutivo estima que los ingresos tributarios crecerían aún más, unos 200 millones de dólares adicionales, y en la medida en que no se cumplan las estimaciones o que sean demasiado optimistas la sociedad se perjudica porque el déficit se cubrirá con deuda.

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