El intento de despido es una acción sin precedentes en los 112 años de la institución y la demanda pone en marcha una batalla legal que en este momento saca a flote los conflictos de Trump con la Fed.

Justo la petición de Cook busca una orden judicial para impedir su despido y “confirmar su estatus” como miembro de la junta de gobierno del banco central de Estados Unidos, diseñado por el Congreso para mantenerse alejado de la influencia de la política diaria.

Para algunos expertos, si Cook gana, se transmitiría una imagen de estabilidad, pero si pierde sería el fin de la independencia de la Fed.

Ningún presidente trató antes despedir a un gobernador de ese organismo financiero hasta que el lunes el mandatario republicano publicó una carta en redes sociales y anunció su decisión de despedirla basado en presuntas acusaciones de fraude hipotecario en 2021 (ella fue nombrada en 2022 para la junta por el entonces presidente Joe Biden).

“La acusación no fundamentada y no probada de que la gobernadora Cook ‘potencialmente’ cometió un error al completar un formulario hipotecario antes de su confirmación en el Senado, no equivale a ‘causa’”, subrayó la demanda, presentada por el abogado de Cook, Abbe David Lowell.

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