Así lo expresó Cabrera en el programa A Partir de Ahora, de Acento TV, donde argumentó que el Código Penal dominicano recién aprobado representa un retroceso democrático al criminalizar, por ejemplo, los cuestionamientos de un funcionario.
Al respecto, consideró que esta medida limita la libertad de expresión y el derecho a estar en desacuerdo.
Denunció, además, que los espacios públicos están siendo cooptados por fuerzas conservadoras que intentan impedir manifestaciones de quienes no comparten sus ideas.
Asimismo, alertó sobre presiones de grupos empresariales para eliminar derechos laborales como el pago de cesantía y el reconocimiento de garantías en el teletrabajo.
En la ocasión, la profesora anunció la celebración de un simposio organizado por el FA este fin de semana (30 y 31 de agosto) con el fin de generar propuestas para enfrentar estos desafíos.
El evento tratará temas como la instrumentación de políticas sociales y la competencia electoral desigual que privilegia a los partidos grandes en el país, detalló.
Cabrera instó a la acción para defender la democracia dominicana ante lo que consideró un intento sistemático de debilitar las instituciones y los derechos ciudadanos.
Maria Teresa Cabrera fue candidata presidencial por el partido FA en las elecciones generales de 2024.
La también ex presidenta de la Asociación Dominicana de Profesores defiende la realización de una reforma educativa profunda, que transforme la estructura y el funcionamiento de las escuelas en su país.
En entrevista con Prensa Latina poco antes de los comicios del año pasado, la candidata del FA
Santo Domingo, 29 ago (Prensa Latina) La presidenta del partido Frente Amplio, Maria Teresa Cabrera, sostuvo que la democracia en República Dominicana afronta amenazas impulsadas por sectores que buscan limitar las manifestaciones públicas y reforzar regresiones en derechos civiles y laborales.
Así lo expresó Cabrera en el programa A Partir de Ahora, de Acento TV, donde argumentó que el Código Penal dominicano recién aprobado representa un retroceso democrático al criminalizar cuestionamientos de un funcionario.
Al respecto, consideró que esta medida limita la libertad de expresión y el derecho a estar en desacuerdo.
Denunció que los espacios públicos están siendo cooptados por fuerzas conservadoras que intentan impedir manifestaciones de quienes no comparten sus ideas.
Asimismo, alertó sobre presiones de grupos empresariales para eliminar derechos laborales como el pago de cesantía y el reconocimiento de garantías en el teletrabajo.
En la ocasión, la profesora anunció la celebración de un simposio organizado por el Frente Amplio este fin de semana (30 y 31 de agosto) con el fin de generar propuestas para enfrentar estos desafíos.
El evento tratará temas como la instrumentación de políticas sociales y la competencia electoral desigual que privilegia a los partidos grandes en el país.
Cabrera instó a la acción para defender la democracia dominicana ante lo que consideró un intento sistemático de debilitar las instituciones y los derechos ciudadanos. Maria Teresa Cabrera fue candidata presidencial por el partido Frente Amplio en las elecciones generales de 2024.
La también ex presidenta de la Asociación Dominicana de Profesores, defiende la realización de una reforma educativa profunda en la República Dominicana, que transforme la estructura y el funcionamiento de las escuelas.
En entrevista con Prensa Latina poco antes de los comicios del año pasado, la candidata del FA se refirió a la necesidad de cambios políticos internos para terminar con la concentración de la propiedad en manos de unas cuantas familias, y la aglutinación del poder en dos o tres cúpulas al servicio de los grupos oligárquicos dueños de la economía nacional.
Opinó Cabrera que es vital lograr la autodeterminación del pueblo para decidir las políticas nacionales y las relaciones políticas y económicas con otras naciones y sus líderes.
En ese sentido, agregó que hasta el momento el rumbo de la República Dominicana está determinado por los intereses de una oligarquía criolla y de Estados Unidos.
Defendió fórmulas encaminadas a desarrollar ese proceso de democratización social, económica y política, que también es “soltar” el país, señaló, de la obligación de las decisiones impuestas por los poderes imperialistas, principalmente el de Washington.
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