Esos desafíos –expresa la nota- afectan el funcionamiento de las sedes diplomáticas, el pago de salario a diplomáticos y a los funcionarios locales contratados, así como a los proveedores de servicios y alquileres.

Nigeria cuenta con más de cien embajadas y consulados en todo el mundo.

Por su parte, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Kimiebi Imomotimi Ebienfa, reafirmó el compromiso del país con una diplomacia internacional sólida y dinámica

A principios de este año, La Oficina Nacional de Estadísticas de Nigeria dio a conocer que la tasa de inflación en el país aumentó en un 34,80 por ciento.

En su informe, la entidad precisa que el precio de los alimentos creció un 39,84 por ciento interanual, especialmente en los cereales.

En junio del 2023, el presidente del país, Bola Tinubu, devaluó la moneda y rebajó los subsidios en un intento por reactivar el crecimiento económico y reforzar las finanzas públicas.

Sin embargo, luego de una serie de aumentos en el precio de la gasolina se desencadenó otra subida, que llevó a la peor crisis en el costo de la vida que esta nación ha vivido en varias décadas.

La situación económica que atraviesa el país, se vio reflejada recientemente con una explosión popular, que acusó al Gobierno de corrupción administrativa, calificada de galopante, mala gobernanza y desmesurados salarios para los altos funcionarios públicos en contraste con los elevados niveles de pobreza y hambre en la población.

Nigeria es el país más poblado del continente y el primer productor de crudo entre los estados al sur del Sahara, seguido de Angola.

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