Los organizadores dijeron que al menos 10 mil simpatizantes repletarían la cancha de fútbol del club Villa Ángela en una zona rural de ese municipio bonaerense, que decena de ómnibus transportarían a los seguidores libertarios, más una caravana de mil autos; sin embargo, según cálculos los participantes no pasaron de dos mil.
El rally se desarrolló bajo un fuerte y costoso operativo de seguridad inédito que implicó la movilización de unos 900 efectivos de la Policía Federal, la Policía de PBA y de la guardia de protección presidencial.
El enorme operativo transformó la escena en un despliegue sin antecedentes recientes en el conurbano. Los uniformados –también desplegaron agentes vestidos de civil- blindaron el predio con vallados, francotiradores en techos de casas aledañas y helicópteros sobrevolaron la zona.
El Ministerio de Seguridad bonaerense había advertido que el club carecía de condiciones mínimas: accesos precarios, terrenos anegados, iluminación deficiente y ausencia de vías de escape.
La idea de los organizadores fue desafiar al peronismo en su bastión; el gobernador Kicillof y la intendenta de Moreno, Mariel Fernández, instaron a los habitantes del municipio, históricamente peronista, a no realizar manifestaciones y evitar actos de violencia.
Milei Lanzó los acostumbrados dardos contra el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, la principal figura política en la provincia, a quien volvió a llamar “enano comunista”, repitió la ya manida consigna de campaña de LLA “Kirchnerismo nunca más”, acusó al peronismo de hundir la provincia y llamó a sus seguidores a pintar de violeta (el color de su partido) a toda la comarca.
Antes de concluir, se refirió a que “en el kirchnerismo están tan desesperados” que promovieron el escándalo por el presunto cobro de coimas que golpea la moralidad institucional de su gobierno y en especial a la secretaria general de la Presidencia, su hermana Karina Milei a quien defendió a capa y espada, y terminó abrazándola.
Con Karina en el centro del escenario y los ocho candidatos de LLA en primera fila, Milei buscó transmitir fortaleza y confianza en la victoria en medio de la tormenta política, económica y judicial que agita a su gobierno.

Desde hace días, el presidente aseguraba que su partido aplastaría al kirchnerismo en PBA, sin embargo hoy moderó el vaticinio a que las dos principales fuerzas en la provincia están en un empate técnico. Y convocó a sus simpatizantes a asistir a las urnas para “sacar a estas ratas de su madriguera”.
Encuestas recientes indican que la peronista Fuerza Patria ha recuperado camino y la dan de dos a cinco puntos por encima de LLA.
rc/mh





