Promovida por la Asociación Mundial para la Salud Sexual desde 2010, en esta jornada se trata de divulgar información acerca de los factores de riesgo, enfermedades de transmisión sexual y contagios, así como las precauciones pertinentes para una vida sexual saludable.
Los expertos afirman que la salud sexual no es simplemente la ausencia de enfermedad, disfunción o incapacidad, sino un estado de bienestar físico, emocional, mental y social en relación con la sexualidad.
De ahí que la Organización Mundial de la Salud la defina como «un estado de bienestar físico, mental y social en relación con la sexualidad. Requiere un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y de las relaciones sexuales, así como la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras, libres de toda coacción, discriminación y violencia».
La sexualidad abarca aspectos como el sexo, la identidad de género, el erotismo, el placer, la reproducción y la intimidad; se expresa en pensamientos, valores, creencias, deseos, actitudes, roles y prácticas.
Para lograr y mantener una buena salud sexual, los derechos sexuales de todas las personas deben ser respetados, protegidos y cumplidos.
Esto implica el derecho a tener relaciones sexuales placenteras y seguras, libres de coerción, discriminación y violencia, así como el acceso a la educación y servicios de salud sexual.
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