Mediante un comunicado, la entidad afirmó que las precipitaciones podrían favorecer tal situación en las barrancas que nacen del coloso, ubicado entre los departamentos de Sacatepéquez, Escuintla y Chimaltenango.
Un lahar es un flujo de lodo y escombros de origen volcánico que se desplaza ladera abajo de un volcán, arrastrando agua de lluvia o agua producto del derretimiento de hielo.
Por ello, recomendó a la población evitar permanecer en sus alrededores o intentar cruzarlas durante el paso de material volcánico.
Instó a los vecinos de las comunidades aledañas a identificar las rutas de evacuación disponibles, seguir las indicaciones de las autoridades locales y proteger los depósitos de agua para prevenir su contaminación por ceniza.
El volcán de Fuego, según la Conred, registra este miércoles entre ocho y 10 explosiones por hora, catalogadas como débiles y moderadas, que generan columnas de gas y ceniza de hasta cuatro mil 200 metros sobre el nivel del mar.
El material se desplaza hasta 12 kilómetros al oeste y noroeste, de acuerdo con informes del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología.
Debido a la actividad, el complejo volcánico presentó desgasificación débil a moderada y se observó la caída de material incandescente alrededor del cráter, el cual descendió en algunas ocasiones hasta el límite de la vegetación.
El de Fuego, a solo 45 kilómetros de la urbe, a pesar del tiempo sigue como el más activo de Guatemala y Centroamérica, con su última erupción el 4 de mayo de 2023.
El jefe de Meteorología del Insivumeh, César George, pidió, por otra parte, tratar de no cruzar ríos en horas de la tarde, que es cuando se presentan las lluvias más fuertes.
Y si van a acompañar las antorchas de las fiestas patrias, preferiblemente hacerlo durante el día y no durante la noche, por el peligro que podemos tener por algún deslizamiento de tierra, acotó el especialista.
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