La ansiedad, las dudas y una confesión inesperada sobre su pausa en la actuación mantienen en ascuas a Day-Lewis, a quien recordamos en magistrales actuaciones en los filmes “Mi pie izquierdo” (1989) -autobiografía del poeta y pintor Christy Brown, víctima de una parálisis de nacimiento- y de “El hilo invisible” (2017).
El regreso del actor al cine, tras una pausa de ocho años, genera gran expectación en la industria, pero ahora llega como protagonista de una propuesta al lado de su hijo Ronan Day-Lewis como director: “Anemone”.
Durante una entrevista con Rolling Stone, el intérprete abordó las razones detrás de su retiro temporal y aclaró que jamás tuvo la intención de abandonar definitivamente la actuación.
Nunca pretendí retirarme en realidad, solo dejé de hacer ese tipo de trabajo para poder dedicarme a otra cosa, explicó Day-Lewis al medio estadounidense.
La decisión de alejarse de la actuación, anunciada hace ocho años tras el estreno de “Phantom Thread”, del director Paul Thomas Anderson, fue comunicada en su momento a través de un representante.
Daniel Day-Lewis no trabajará más como actor. Esta es una decisión privada y ni él ni sus representantes harán más comentarios al respecto, comentó el vocero en aquel momento.
Sin embargo, el propio actor reconoció ahora que, en retrospectiva, “hubiera preferido no hacer pública esa determinación.
Habría sido mejor que me quedara callado, admitió en la conversación con Rolling Stone.
El historial de supuestos retiros de Day-Lewis no es nuevo, pues ya se apartó del cine tras finalizar “The Boxer” (1997) antes de regresar en 2002 con “Gangs of New York”, de Martin Scorsese.
Durante ese intervalo se dedicó a aprender el oficio de zapatero junto al reconocido artesano italiano Stefano Bemer. En 1989 abandonó de manera aparentemente definitiva el teatro después de interpretar a “Hamlet” en el National Theatre de Londres.
La motivación para volver a actuar surgió, según relató Day-Lewis a Rolling Stone, de la oportunidad de colaborar con su hijo en un proyecto cinematográfico.
A medida que envejezco me lleva cada vez más tiempo volver a encontrar ese lugar donde el fuego interior arde de nuevo, pero trabajando con Ro, ese fuego se encendió, y fue, de principio a fin, una alegría pura pasar ese tiempo juntos, expresó el actor.
No obstante, el regreso no estuvo exento de dudas. Day-Lewis confesó que sintió cierta ansiedad ante la idea de reincorporarse al mundo del cine.
La experiencia de rodar “Phantom Thread” (El hilo invisible) resultó especialmente exigente para el actor.
Hay algo en el proceso de actuar que me dejó vacío al final; entendía que todo era parte del proceso y que eventualmente habría una regeneración, pero fue solo en la última experiencia, haciendo “Phantom Thread” cuando empecé a sentir con fuerza que tal vez esa regeneración ya no llegaría; que probablemente debía mantenerme alejado, porque sentía que no tenía nada más que ofrecer, confesó Day-Lewis.
El estreno mundial de “Anemone” está previsto para este mes en el Festival de Cine de Nueva York.
mem/dpm





