El presidente de esa organización, Rafael Negrete, dijo este lunes a los medios que el salto del diésel de 1,80 a 2,80 dólares por galón golpea directamente a campesinos, agricultores y transportistas.
Si bien no convocó directamente a movilizaciones en rechazo a la disposición del Ejecutivo, sí informó que realizarán una asamblea provincial el próximo viernes para definir posibles acciones de protesta.
“Unamos fuerzas frente a estos maltratos. Cotopaxi no se vende y el Ecuador no se arrodilla”, enfatizó el dirigente, que junto a otros representantes del MICC se pronunció contra la minería y la falta de inversiones en salud, educación, y seguridad.
El MICC recordó las históricas movilizaciones de octubre de 2019 y junio de 2022, lideradas por el movimiento indígena contra políticas neoliberales de los gobiernos de aquel momento, y rechazó que la protesta social sea considerada desde entonces como vandalismo o terrorismo.
“Siempre hemos salido a las calles en defensa de los derechos, no para destruir”, apuntó.
Por otro lado, Negrete calificó la presencia de Noboa en la provincia andina de Cotopaxi como un acto de provocación en medio de las tensiones por el incremento del valor del diésel.
Este lunes, la sede de la Gobernación amaneció militarizada debido a que el jefe de Estado decidió ubicar la sede gubernamental en Latacunga, capital del territorio, y ya despacha desde el sitio.
La Confederación de Pueblos de la Nacionalidad Kichwa del Ecuador también expresó «su rechazo a las medidas económicas neoliberales impulsadas por el presidente Noboa, que tienen como propósito un retroceso y golpe directo a los bolsillos de cada uno de los ecuatorianos».
La decisión de poner fin al subsidio, a pesar de los bonos de ayuda, generó oposición, principalmente entre transportistas que mantienen cerradas varias carreteras en el país, incluido un tramo que enlaza Quito con Latacunga.
Además, el Frente Unitario de Trabajadores y la Federación de Estudiantes Universitarios del Ecuador anunciaron protestas esta misma semana contra lo que muchos catalogan como un paquetazo neoliberal.
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