En rueda de prensa desde Latacunga, sede temporal de la administración de Daniel Noboa en la provincia de Cotopaxi, la portavoz sostuvo que la disposición responde a la necesidad de dirigir los recursos públicos hacia programas sociales y productivos.
Afirmó que aunque se han advertido manifestaciones en rechazo al alza, el Ejecutivo no modificará su postura.
La funcionaria señaló que si bien el Gobierno mantiene apertura para el diálogo, las decisiones en materia de política pública corresponden únicamente al Gobierno, liderado por Daniel Noboa.
“Hemos dialogado siempre, pero no hay espacio para la extorsión ni para la negociación entendida como una presión en la que el Gobierno tendría que terminar cediendo”, aseveró.
En relación con los bloqueos de vías registrados en distintos puntos del país, Jaramillo enfatizó que el Ejecutivo ha sido “contundente” frente a esas acciones y adelantó que en las próximas horas se procederá a la desactivación de cierres.
Insistió en que no es un “paquetazo”, como afirman las organizaciones sociales, pues el Gobierno entregará compensaciones a los transportistas luego de que el diésel subiera de 1,80 a 2,80 dólares por galón desde el pasado sábado.
Aunque aseguró que no existen motivos para incrementos de pasajes o precios, las ayudas mencionadas serán otorgadas por ocho meses, con posibilidad de ampliarse a cuatro meses más, para que los transportistas puedan adaptarse a las nuevas condiciones.
Añadió que las medidas adoptadas para mitigar el incremento del precio del diésel conforman el “programa más ambicioso de redistribución de recursos y entrega de recursos sociales”.
En ese sentido, mencionó la entrega del nuevo Bono Raíces de mil dólares para agricultores y la inyección de 100 millones de dólares mediante créditos del banco Banecuador.
Mientras el Ejecutivo sostiene firme su postura, manifestantes mantienen cerrada la carretera Panamericana Sur en la localidad de Mejía, provincia de Pichincha, y se mantiene el bloqueo de vías en la norteña provincia de Carchi.
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