Según reportó hoy la Oficina Nacional de Estadísticas (Stats SA), el IPC mensual mostró un descenso del 0,1 por ciento en agosto, reflejando una moderación en el ritmo de aumento general de precios.

Los sectores que más incidieron en la inflación anual fueron vivienda y servicios públicos con un alza del 4,3 por ciento, aportando un punto porcentual, y alimentos y bebidas no alcohólicas, que subieron un 5,2 por ciento, contribuyendo 0,9 puntos porcentuales.

En cuanto a la inflación anual por categorías, añade Stats SA, los bienes presentaron una tasa del 3,1 por ciento, ligeramente menor al 3,2 por ciento de julio, mientras que los servicios se mantuvieron estables en 3,6 por ciento. Según analistas locales, esas cifras se enmarcan en un contexto global de incertidumbre económica, donde el control de la inflación representa un desafío para las autoridades sudafricanas, especialmente ante la presión que ejercen los precios de los alimentos y los costos asociados a la vivienda y la energía.

Los expertos económicos subrayan la importancia de esas tendencias para la política monetaria del país y para la capacidad de compra de los consumidores, en un entorno marcado por la recuperación postpandemia y la volatilidad de mercados internacionales.

El comportamiento observado sugiere una ligera mejora en la contención de precios, aunque persisten riesgos vinculados a factores externos y al contexto socioeconómico local que podrían afectar la evolución futura del costo de vida, concluyen.

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