“Bolivia está reportando mil 452 focos de calor: en Beni 712, en Santa Cruz 564; en Cochabamba 89, en La Paz 54; Pando 15, Potosí 13 y Chuquisaca cinco”, afirmó la autoridad desde el Centro de Monitoreo de Incendios en Santa Cruz de la Sierra. Informó Calvimontes que se registran fuegos activos en los municipios de San Andrés y Loreto, en Beni, producto de quemas controladas de pastizales.
Añadió que, en Villa Tunari, Cochabamba, un fuego activo lleva tres días, por lo que se monitorea su evolución.
En relación con el departamento cruceño se reportan fuegos activos en San Ignacio de Velasco, San Miguel y Concepción, de los cuales dos ya son incendios forestales.
Observó el viceministro que existe una reducción considerable de focos de calor en el territorio nacional con respecto al año pasado.
Según datos de Defensa Civil, en septiembre de 2024 se registraron 991 mil 903 focos de calor, mientras que en lo que va de 2025 se reportan 52 mil.
“Es decir, comentó, hay una reducción considerable y eso explica por qué no existe una gran cantidad de incendios forestales en el país”.
La crisis de incendios que se incrementa entre agosto y noviembre durante la etapa de sequía, suele afectar con mayor intensidad a departamentos como Santa Cruz, Beni y Cochabamba, provoca pérdidas económicas y de biodiversidad, además de tener serias implicaciones para la salud pública debido a la contaminación del aire.
Calvimontes subrayó que el ingreso de un frente frío con lluvias ayuda a mitigar la situación actual.
“La buena noticia para el día de hoy -dijo la autoridad-, es que ha ingresado un frente frío del sur, acompañado de bastante lluvia. En este momento está lloviendo en parte del Chaco boliviano: es decir, el Chaco tarijeño, cruceño y chuquisaqueño. Está lloviendo intensamente en Santa Cruz, y esta lluvia está alcanzando parte de la Chiquitania”.
Se espera que el fenómeno climático avance y lleve precipitaciones a Cochabamba, Beni e incluso Pando en los próximos días.
“Eso nos alivia bastante, porque va a permitir que todos aquellos lugares donde están chaqueando o donde hay algún incendio pueda ser sofocado rápidamente”, enfatizó el vicetitular.
La temporada de incendios forestales en Bolivia es un problema recurrente, especialmente entre los meses de agosto y noviembre.
Se caracteriza por un aumento significativo de focos de calor, que son el resultado de la combinación de prácticas agrícolas como el «chaqueo» (quema de la vegetación para preparar los cultivos), las altas temperaturas y las sequías prolongadas.
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