De acuerdo con un informe del mayor gremio del empresariado privado en el istmo, en el país hay cerca de 700 mil emprendedores, pero casi la mitad está en la informalidad.
Según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), el 49.3 por ciento de la población económicamente activa trabaja sin garantías de un empleo formal, mientras el desempleo ronda el 9.5 por ciento.
Para el titular de la Cciap, Juan Arias, el mayor reto es convertir el ingenio en negocios formales, sostenibles y capaces de generar bienestar colectivo.
Arias opinó que la clave está en convertir «esas ganas de buscarse el día a día” en motores de crecimiento sostenible.
En ese sentido adelantó que mañana se realizará el III Congreso de Emprendimiento con sede en el Instituto Técnico Superior Especializado (ITSE) con conferencias sobre inteligencia artificial, sostenibilidad, herramientas digitales y los trámites para emprender en regla.
Arias recordó que “formalizarse no es un castigo, al contrario, es ponerse la camiseta de las grandes ligas: abre las puertas a financiamiento, clientes grandes y a la confianza del mercado”.
El Global Entrepreneurship Monitor 2023/2024- proyecto de evaluación anual del nivel nacional de actividad empresarial en múltiples y diversos países- ubicó al istmo entre los de mayor tasa emprendedora temprana en Latinoamérica, al nivel de Suecia e Italia.
“Cuando un emprendedor crece, crece Panamá”, recalcó Arias.
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