Por Fausto Triana

Una afirmación que mis colegas de París saborearán con fruición, después que el equipo dirigido por el español Luis Enrique hiciera gala de una intensidad tremenda, ante un Barcelona competitivo, pero inferior si bien la pizarra no fue escandalosa (2-1).

Los comentarios de admiración llegaron hasta de la propia prensa catalana y española en general, aunque con algunas críticas al arbitraje, como es normal en el fútbol.

El gran detalle es que el PSG no pudo contar con jugadores imprescindibles en su alineación titular, como el flamante Balón de Oro, Ousmane Dembelé, el joven atacante Desiré Doue, el extremo georgiano Khvicha Kvaratskhelia, el defensa brasileño Marquinnho ni tampoco el volante de contención portugués Joao Neves.

Se habla de un conjunto de autor, en referencia al éxito de Luis Enrique y la exhibición de buen fútbol de su plantilla. Anoche apeló por obligación a los jovencitos Mayulu (autor de un gol) y Mbaye, y dio más protagonismo al mediocampista Zaire-Emery y especialmente al delantero Barcolá.

Tenemos que funcionar así, somos un colectivo y como tal debemos desenvolvernos. Los jugadores lo han entendido muy bien, y esto nos permite ganar partidos como este, comentó Luis Enrique, comedido y respetuoso por enfrentarse a su antigua escuadra, a la que también dirigió como entrenador.

Sin embargo, el primer tiempo pareció mostrar un equilibrio en las acciones, hasta que en un contragolpe, Ferrán Torres abrió el marcador a los 19 minutos. La reacción no se hizo esperar y tras un impasse favorable a los azulgrana, Mayulu logró igualar a los 38 minutos.

El resto fueron compases furibundos, con más dominio del PSG, que lo intentó de mil maneras, hasta que a los 90 minutos, un pase rasante de Hakimi (excepcional partido) encontró el remate del revulsivo Gonçalo Ramos, para el 2-1.

La fecha dejó otra buena noticia para el balompié español, con el empate del Villarreal con la Juventus 2-2, con dianas de Mikautadze y sobre todo de Renato Vega a los 90 minutos, mientras por los italianos anotaron Gatti y Conceiçao.

Un alegrón para el submarino amarillo, tercero en LaLiga de España, que el sábado enfrenta al sublíder, el Real Madrid, en el Santiago Bernabéu.

En horas bajas siguió el Athletic de Bilbao, goleado por el Borussia Dortmund 1-4, con un gol en solitario de Guruzeta.

La sorpresa de la fecha fue el empate del Mónaco 2-2 con el Manchester City, pese a los dos tantos del gigante noruego Erling Haaland.

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