En un comunicado, el árbitro principal del proceso eleccionario informó que la normativa, establecida a partir del 1 de octubre, busca garantizar la igualdad de condiciones entre los partidos políticos participantes en la crucial contienda.

Según la Ley Electoral, durante los 60 días previos a los comicios no podrán realizarse actos de inauguración, como ceremonias o eventos oficiales donde las autoridades del gobierno central o alcaldías presenten la finalización y entrega de obras financiadas con fondos estatales.

El CNE recordó que quienes violen esta disposición estarán sujetos al pago de una multa equivalente a dos salarios mensuales, que se duplicará en caso de reincidencia, sin perjuicio de la destitución de sus cargos.

Exhortó a todos los funcionarios y empleados públicos a observar y acatar esta disposición de la Ley Electoral.

La restricción recae únicamente sobre los actos inaugurales y su difusión, no sobre la ejecución o culminación de los proyectos, aclaró el ente rector de los procesos plebiscitarios en este país centroamericano.

El organismo aclaró que sí se permitirá la difusión de campañas institucionales de gobierno, siempre que no aparezcan imágenes, nombres, voces o firmas de funcionarios, partidos políticos o candidatos.

Quedan exceptuadas de la prohibición las campañas de salud, seguridad, protección civil, desastres naturales y las de carácter electoral, detalló.

Tras llamar a funcionarios y medios de comunicación a cumplir de manera estricta la normativa, el CNE subrayó que su observancia es clave para garantizar unas elecciones libres, democráticas y justas.

Más de seis millones de hondureños están convocados el último domingo de noviembre a elegir al nuevo presidente (a), tres designados presidenciales (vicepresidentes), 298 alcaldes, 128 diputados al Congreso Nacional (Parlamento) y 20 representantes al Parlamento Centroamericano.

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