A las 09:00, hora local, se abrieron los colegios electorales para que los más de seis mil miembros del órgano electoral comenzaran a votar por los nuevos miembros del parlamento, cuya composición refleja una reconfiguración institucional clave en el proceso de reconstrucción del Estado sirio.

Según informó Nawar Najma, portavoz del Comité Supremo para las Elecciones a la Asamblea Popular, el proceso de votación concluirá inicialmente a las 12:00 horas, con posibilidad de extenderse hasta las 16:00, si no todos los miembros emiten su sufragio.

Las últimas elecciones legislativas sirias se celebraron en julio de 2024, cuando Bashar Al-Assad aún ocupaba la presidencia. Sin embargo, en enero del presente año, el nuevo liderazgo político disolvió esa Asamblea como parte del proceso de transición institucional.

Las elecciones originalmente previstas para septiembre fueron postergadas debido a la situación de inestabilidad en el noreste del país controlado por las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) y en la provincia meridional de Sweida.

De acuerdo con el Comité Supremo Electoral, organismo establecido por decreto presidencial, se aprobaron mil 570 candidaturas, de las cuales el 14 por ciento corresponden a mujeres. Los aspirantes participaron esta semana en seminarios y debates públicos como parte de un proceso de selección más abierto y deliberativo.

De los 210 escaños que componen la Asamblea, 140 son electos y 70 serán designados por el presidente de la República, conforme a lo dispuesto en la Declaración Constitucional promulgada en marzo pasado.

No obstante, debido al aplazamiento de los comicios en ciertas regiones, solo se votará hoy por 120 escaños en lugar de los 140 previstos inicialmente en 60 circunscripciones.

El actual sistema de elección indirecta fue adoptado ante la imposibilidad de organizar elecciones generales convencionales, dada la falta de registros censales confiables y el desplazamiento masivo de millones de sirios como resultado del conflicto interno que azotó al país durante más de una década.

La formación de esta nueva Asamblea Popular representa un paso significativo en el camino hacia la institucionalización de un nuevo orden político en Siria, en medio de un escenario complejo de reconstrucción nacional y recomposición del tejido social.

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