De acuerdo con el mandatario húngaro, Kiev no podrá forzar un cambio en la postura de Budapest mediante acciones que calificó de chantaje, en respuesta a declaraciones del presidente ucraniano.

Hungría carece de obligaciones morales para apoyar el ingreso de Ucrania a la UE, escribió el jefe de Gobierno en su cuenta de la red social X.

Orban recordó que toda decisión sobre membresía en el bloque europeo requiere el consenso unánime de los 27 Estados miembros.

El pueblo húngaro ya decidió. Una amplia mayoría ciudadana se manifestó en contra de esa adhesión en un referendo, sostuvo el dirigente conservador.

Analistas coinciden en que la posición húngara representa un obstáculo para las aspiraciones europeas de Ucrania, en un momento crítico del conflicto.

Si se desea modificar esta postura, la campaña mediática contra Hungría quizá no sea el método más idóneo para ganar aliados, advirtió Orban al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.

Durante la jornada pasada, Zelenski, en una rueda de prensa con el primer ministro holandés, Dick Schof, propuso modificar las normas de adhesión a la UE para eludir el veto de Hungría, que bloquea el progreso del país hacia su adhesión a la unión.

Expertos consideran que la postura magiar refleja las tensiones dentro de la UE respecto a la expansión hacia el este y las condiciones para nuevos integrantes.

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