“Lo que se anunció ayer no es a México, es a todo el mundo. El arancel de los vehículos pesados no es para México. Obviamente, a México le afecta más, porque tenemos exportación de vehículos pesados, y vamos a buscar un acuerdo antes del 1 de noviembre”, dijo la mandataria.

Durante su habitual encuentro con medios de comunicación, la jefa del Ejecutivo agregó que, de ser necesario, se coordinará una llamada personal con el mandatario del vecino territorio norteño, Donald Trump, quien informó ayer la medida en su plataforma Truth Social.

Según refirió la gobernante, el secretario de Economía de México, Marcelo Ebrard, está en contacto con el titular de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, así como el embajador de esa nación sobre tratados comerciales, para abordar el asunto.

La presidenta aludió a próximas llamadas telefónicas con administradores de empresas del ramo, con el objetivo de comunicarles que su administración hará todo cuanto sea posible para evitar la aplicación de estos gravámenes al país.

Si bien sobre México pesa una tarifa del 25 por ciento en el caso de los productos fuera del tratado entre esta nación, Estados Unidos y Canadá, además de los aplicados sobre otros como acero o autos, la enorme mayoría de sus ventas a aquella nación se mantiene libre de aranceles.

Es “el país con el menor porcentaje de tarifas arancelarias, en promedio, en todo el mundo y continuamos trabajando” con las Secretarías del territorio vecino, expuso Sheinbaum hace algunas semanas, al confiar en que, en el marco del acuerdo comercial, puede alcanzar aún mejores condiciones.

La Secretaría de Economía informó a principios de este mes sobre el inicio de consultas a 30 sectores productivos considerados relevantes para el comercio con América del Norte, de cara a la revisión del tratado de Norteamérica, prevista en 2026.

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