Por Fausto Triana

El título en la pasada Eurocopa de Alemania 2024, sumado a otro cetro y un segundo puesto en las dos últimas Nations League, parecen argumentos de peso para pensar en España como candidato a luchar por el título del orbe en la cita de Estados Unidos, México y Canadá.

Si vence a Georgia y Bulgaria en los partidos del próximo sábado y el martes 14 de octubre, en Elche y Valladolid, respectivamente, igualará la anterior racha de 29 éxitos sucesivos de la Roja en el máximo nivel masculino, antes de 2010 a 2013.

No es poca cosa en el historial del técnico Luis de la Fuente, hasta hace un tiempo casi desconocido en el grupo de élite de los entrenadores españoles. Fracasó su antecesor en Qatar 2022, Luis Enrique, y tomó las riendas.

El único desliz fue en sus inicios cuando incluso fue cuestionado. La derrota 0-2 frente a Escocia supo mal, pero sirvió para tomar un camino más independiente y de estilo propio.

Ahora acaba de perder por lesión al jovencito de 19 años Dean Huijsen, perla del Real Madrid en la zaga central. Sin embargo, tiene reservas y echó mano del hispano-francés Aymeric Laporte, jugador de su gusto.

Tampoco podrá contar con los explosivos atacantes Nico Williams y Lamine Yamal, los mediocampistas Rodri Hernández y Fabián Ruíz, ni con el lateral Dani Carvajal. Aun así, De la Fuente confía, porque el equipo tiene muchos recursos.

Los motivos para el optimismo son fundados. La participación de España en la Copa Mundial de Fútbol parece cosa segura y el preparador busca de todas formas confirmar el liderazgo español en el grupo E, oon seis puntos.

Tiene la posibilidad de quedar virtualmente clasificada si solventa los duelos contra Georgia y Bulgaria.

Aunque el conjunto ha demostrado que sabe adaptarse a distintos jugadores ante ausencias, el preparador llamó a filas al delantero Borja Iglesias (Celta de Vigo), en racha goleadora con su club. Además, al volante Pablo Barrios y al polivalente Marcos Llorente, ambos del Atlético Madrid.

Marcadores de 3-0 y 6-0 frente a Bulgaria y Turkiye, respectivamente, confirmaron que la Roja está para grandes cosas, pero como primer objetivo aparece la clasificación directa, bastante tangible a priori.

ro/ft