Según el medio, una unidad compuesta por tres vehículos militares israelíes rodeó a los trabajadores mientras desempeñaban sus labores en tierras agrícolas cercanas a la llamada «Línea Roja», que marca la franja de separación entre los territorios sirios y el Golán ocupado.

Tras su detención, los civiles fueron trasladados hacia el lado ocupado del Golán, y hasta el momento se desconocen los motivos de las detenciones arbitrarias, que forman parte de una política sistemática de hostigamiento y agresión contra los habitantes sirios de la región fronteriza, señalaron residentes locales.

Estas detenciones ocurren en un contexto de reiteradas violaciones de las fuerzas israelíes en el sur de Siria, particularmente en Quneitra, donde se registraron incursiones terrestres, disparos contra civiles y obstrucción a la actividad económica local, como la recolección de leña o el pastoreo tradicional.

El pasado 20 de septiembre, las fuerzas israelíes liberaron al pastor Burhan Jarwan al-Saleh, arrestado cerca de la localidad de Koudna, también en Quneitra.

En otro incidente ocurrido hace dos días, un joven fue herido por disparos israelíes mientras recogía leña en el bosque de Jabata al-Khashab.

Fuentes locales denuncian que las fuerzas de ocupación no solo interfieren en la vida diaria de los residentes sirios, sino que además realizan vuelos de reconocimiento con drones, operaciones de espionaje y penetraciones militares en territorio soberano sirio, en clara violación de la legalidad internacional.

Tel Aviv incrementó durante los últimos meses sus ataques aéreos contra infraestructuras militares sirias, con el objetivo de debilitar al Estado y obstaculizar los esfuerzos de reconstrucción nacional, especialmente en las regiones fronterizas de Damasco-campo, Quneitra y Deraa.

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