De acuerdo con el informe de la entidad financiera sobre la evolución de la IED, el ingreso bruto fue de mil 427.9 millones de dólares, cifra inferior a los mil 696.6 millones registrados en el mismo lapso de 2024.

El documento detalla que el ingreso bruto de la IED representó el 13,7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), mientras que el flujo neto semejó al 7,8 por ciento del PIB, indicadores que reflejan la sostenida confianza de los inversionistas extranjeros en la economía nicaragüense.

Entre las principales fuentes de ingresos brutos de IED destacan los desembolsos de deuda relacionada, que alcanzaron 589.5 millones de dólares (41,3 por ciento del total); las utilidades del período, con 580.8 millones (40,7); y los aportes de capital, con 257.6 millones (18 por ciento).

El Banco Central precisó que la reinversión de utilidades fue uno de los componentes más dinámicos del semestre, al totalizar 568.1 millones de dólares, superior en 90.6 millones a lo registrado en el mismo período de 2024.

Por el contrario, el flujo neto de deuda relacionada resultó negativo en 7 millones de dólares, debido a que los pagos de amortización superaron los desembolsos recibidos, a diferencia del resultado positivo del año anterior.

Las actividades económicas con mayor captación de IED fueron energía y minas, intermediación financiera, industria manufacturera, y comercio y servicios.

En cuanto a los países de origen de los flujos netos, destacaron Panamá, con 247 millones de dólares (30,2 por ciento), y Estados Unidos, con 138.9 millones (17 por ciento).

También sobresalieron aportes de Barbados (115.7 millones de dólares), México (53.6 ), Colombia (52.7), Países Bajos (35.6), Costa Rica (35.2) y China (29 millones de dólares), entre otros.

Según el BCN, estos resultados reflejan el atractivo de Nicaragua como destino de inversión, sustentado en la estabilidad macroeconómica, las políticas de estímulo productivo y las condiciones favorables para el capital extranjero.

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