Hanoi debe construirse como una ciudad de cultura, identidad y creatividad que aspira a ser una capital civilizada, moderna y sostenible, con la sabiduría de los tiempos y estatura global, enfatizó al dirigirse a los delegados al XVIII Congreso del Comité partidista municipal.
To Lam señaló que, para entrar en una nueva etapa de desarrollo, la urbe “requiere una visión integral y sistemática, donde la ideología, las instituciones, el espacio, la economía y las personas se integren en un todo de desarrollo sostenible”, para lo cual sugirió un grupo de requisitos y tareas.
En primer lugar, dijo, construir un Partido y un sistema político limpios y fuertes, ejemplares y que actúen con responsabilidad. “Este es el primer eje decisivo, que determina todos los éxitos”, remarcó.
Aludió también a la necesidad de crear un modelo de gobernanza completamente nuevo, capaz de coordinar, dirigir y resolver exhaustivamente los problemas urgentes, y que al mismo tiempo abra una visión de desarrollo sostenible a largo plazo.
También se requiere perfeccionar el modelo urbano multipolar y multicéntrico, a fin de convertir cada polo de desarrollo en un verdadero centro dinámico, estrechamente conectado por infraestructura troncal, ejes estratégicos y corredores de conexión integrales.
La planificación, explicó, ya no es un plano estático, sino una estrategia de infraestructura dinámica, continuamente actualizada con datos digitales, monitoreada con modelos de simulación, para asegurar que cada proyecto se implemente con una base sólida, de manera transparente y efectiva.
El líder partidista instó asimismo a convertir a Hanói en un centro de ciencia, tecnología e innovación, un motor central para promover el desarrollo regional y nacional basado en una economía que se sustente en el conocimiento, y a tomar a las personas como centro y medida de todo desarrollo.
“Centrar la atención en las personas no es solo una perspectiva humanista, sino también el principio fundamental de una ciudad moderna, inteligente y sostenible”, insistió To Lam y aseguró que cuando éstas estén plenamente desarrolladas, “la sociedad será verdaderamente justa, creativa y feliz”.
En otra parte de su discurso el Secretario General del PCV ponderó el hecho de que los objetivos establecidos en el XVII Congreso del Partido de la Ciudad se lograron y superaron básicamente y destacó que la calidad de vida de los capitalinos mejora cada vez más, con el índice de desarrollo humano más alto del país.
Se refirió asimismo a las limitaciones y debilidades señaladas en el informe político, entre ellos muchos obstáculos de larga data, y remarcó que “debemos afrontar la verdad para cambiar; es un requisito indispensable si queremos lograr un avance significativo”.
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