El funcionario compareció este martes ante la Comisión de Soberanía Integral de la Asamblea Nacional (Parlamento) dentro un proceso de fiscalización sobre varias detonaciones recientes que han sacudido la urbe.

Álvarez se centró en los vínculos entre el presunto autor de un atentado en la Bahía de Guayaquil en junio pasado, con un automóvil marca Porsche, cuya matrícula indica que pertenece a la compañía de la familia del mandatario.

El alcalde exigió una explicación inmediata y clara sobre la presencia de este auto de lujo en la vivienda del sospechoso del atentado que, a pesar de todo, está en libertad sin que la Fiscalía presentara cargos.

El abogado Pedro Granja, en representación de la Comuna de Barrios de Guayaquil, también se refirió al caso del Porsche y calificó como “una extraña coincidencia” que el vehículo ingresara al domicilio del sospechoso mientras las autoridades omitieron ese hecho en el expediente.

La Fiscalía ecuatoriana tiene un código penal para los amigos, y otro para los enemigos. Un código penal para perseguir a Aquiles Alvarez y para encerrar a ‘Los 12 de Otavalo’ y otro para ‘Progen’, ‘PetroNoboa’ y para el ‘CasoPorsche’ ”, dijo Granja.

Por su parte, la asambleísta Nataly Morillo, del movimiento oficialista Acción Democrática Nacional (ADN), consideró que la oposición trata de generar falsas narrativas al intentar culpar al Gobierno de los atentados con coche bomba que se han dado en el país.

Morillo defendió la actuación del Ejecutivo frente al crimen organizado, mientras Álvarez reclamó por la falta de acción estatal ante los 12 atentados con bombas ocurridos este año en la ciudad portuaria y otros casos de corrupción.

En medio del debate, los legisladores rechazaron la ausencia en la sesión de los ministros de Defensa, del Interior, de Gobierno, así como los titulares de la Policía Nacional y la Fiscalía, que fueron citados para dar explicaciones ante la crisis de seguridad.

Este lunes, el asambleísta Juan Andrés González, de la Revolución Ciudadana, presentó una denuncia ante la revelación del Porsche, que hace dudar sobre un posible encubrimiento desde el poder a episodios de violencia que estremecen al país.

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