El jefe de la Comisión de Resistencia al Muro y los Asentamientos, Mu’ayyad Shaaban, explicó que los ataques incluyen agresiones físicas, arrestos, restricciones de movimiento, negación de acceso a las tierras e intimidación.
Precisó que 141 de ellos fueron cometidos por colonos judíos y el resto por la Policía o el Ejército.
Los ataques se concentraron en la gobernación de Nablus con 56 incidentes, seguida de Ramala (51) y Hebrón (15), detalló.
Shaaban criticó las leyes israelíes que justifican tales agresiones y la entrega de armas a los colonos, así como la exoneración de responsabilidades y juicio a esas personas pese a las continuas violaciones.
Con esas acciones Israel intenta perturbar el modo de vida palestino, históricamente vinculado a la tierra como fuente de sustento, afirmó.
También el Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados palestino condenó mediante un comunicado los recientes ataques contra agricultores palestinos y activistas extranjeros durante la cosecha de aceitunas en Cisjordania.
Tales incursiones se ejecutan bajo la protección y coordinación del Ejército y forman parte de un plan continuo de genocidio y desplazamiento forzado para obstruir cualquier esfuerzo internacional destinado a establecer un Estado palestino, subrayó.
Al respecto, la Cancillería criticó la detención de 32 activistas extranjeros que apoyaban a los agricultores y documentaban violaciones israelíes.
oda/rob





