A siete meses de instalarse en el poder, la gestión de la actual administración tuvo una desaprobación del 33 por ciento del total, con el interior con el mayor porcentaje de rechazo.
La valoración positiva de la gestión viene disminuyendo.
En junio el visto bueno alcanzó el 46 por ciento, en agosto el 44 y en octubre el 39 por ciento. En tanto, su desaprobación creció 11 por ciento en ese período.
Los indecisos, en tanto, se mantuvieron prácticamente estables entre el 28 y el 33 por ciento.
Por su parte, los votantes del Frente Amplio (FA) tienen una aprobación del 70 por ciento y una desaprobación del 10, mientras que los indecisos llegan a 19 puntos porcentuales.
Respecto a los votantes de la Coalición República, de oposición, la mirada negativa se eleva al 55 por ciento, los indecisos rondan el 33 y solo el 12 aprueba su desempeño. mem/ ool





