En declaraciones a la prensa, el titular precisó desde el centro de crisis activado por vigilar la llamada “bomba meteorológica” que el herido grave es un bombero, pero que su vida no corre peligro.

De acuerdo con Núñez, el impacto de Benjamin se va alejando poco a poco, aunque quedan aún unas horas de embate.

La agencia Météo France colocó a una veintena departamentos en alerta naranja, el segundo nivel más alto, sobre todo en regiones del oeste y del noreste de la cara atlántica, condición en la que solo quedan seis de esos territorios.

Respecto al servicio eléctrico, el suministrador Enedis informó que 140 mil hogares siguen afectados, con la mayor cantidad reportada en Nueva Aquitania (40 mil) y Auvernia-Ródano-Alpes (35 mil).

La tormenta Benjamin golpeó a Francia temprano en la mañana con vientos superiores a los 100 kilómetros por hora, con varios récords registrados, como los 161 marcados por los anemómetros en Fécamp, localidad costera situada en la región de Alta Normandía, y los 119,6 kilómetros por hora en La Rochelle.

En Ouistreham, en Normandía, cuatro marinos fueron rescatados de manera espectacular por un helicóptero, ante el riesgo de naufragio de la embarcación en la que se encontraban.

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