En rueda de prensa altas autoridades presentaron a 37 detenidos por formar parte de un grupo que se dedicaba a robar celulares en autobuses y que integraban además de salvadoreños, ciudadanos hondureños, nicaragüenses y guatemaltecos.

Los integrantes del gabinete de Seguridad, el fiscal general Rodolfo Delgado, el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Villatoro, y el titular de la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME), Ricardo Cucalón, informaron de la situación.

Delgado precisó que los arrestados, 17 hondureños, 11 salvadoreños, ocho nicaragüenses y un guatemalteco, hurtaban teléfonos en varias rutas de ómnibus.

Sostuvo el fiscal que uno de los indicios para investigar a los acusados es que remesaban todos los días entre 80 y 120 dólares hacia otros países.

Delgado identificó a los nicaragüenses Joel Isaías Guerrero Siu y Rodrigo José Guerrero Siu como cabecillas de la banda.

Por su parte Cucalón, manifestó que empezaron a notar patrones comunes en los acusados y advirtió que las autoridades salvadoreñas tienen facultades legales para intervenir hospedajes, restaurantes, hoteles o lugares donde se hospeden.

Asimismo señaló que el estatus migratorio de los extranjeros es irregular porque algunos habrían ingresado a través de puntos ciegos y otros ingresaron como turistas por las fronteras El Amatillo, San Cristóbal y El Poy.

El ministro de Justicia y Seguridad, Villatoro, sostuvo que los extranjeros detenidos no serán deportados hacia sus países de origen sino que se quedarán acá para ser procesados y ofrecer trabajos de utilidad a la sociedad a través del aprendizaje de oficios.

«No vamos a expulsar a estos criminales, los vamos a someter a nuestro proceso penal y los vamos a tener en nuestras cárceles”, dijo.

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