En declaraciones a la agencia nacional SANA, una fuente de la Cancillería precisó que la etapa actual presencia un cambio en la postura estadounidense hacia una interacción directa con el gobierno central sirio, y destacó que Washington ha mostrado disposición a respaldar los esfuerzos de unificación del país y a rechazar cualquier intento de división territorial.

El funcionario explicó que “se está trabajando en trasladar las asociaciones y entendimientos que antes eran de carácter provisional con entidades temporales a Damasco, en el marco de una coordinación política, militar y económica conjunta”.

Siria, agregó la fuente, “avanza con firmeza hacia la consolidación de la estabilidad y el fortalecimiento de la cooperación basada en la soberanía nacional y el respeto mutuo”.

Subrayó que cualquier presencia extranjera en territorio sirio debe responder a los anteriores principios y a la legalidad internacional.

Reuters había publicado que seis fuentes, incluidos dos funcionarios occidentales y un responsable sirio de defensa, afirmaron que Estados Unidos proyectaba establecer una base aérea en el sur de la capital como parte de un presunto pacto de seguridad entre Siria e Israel, mediado por Washington.

Según la agencia británica, el acuerdo representaría un cambio estratégico en las relaciones bilaterales tras el derrocamiento del anterior mandatario Bashar al-Assad en diciembre de 2024.

Asimismo, medios occidentales informaron que el presidente estadounidense Donald Trump prevé recibir al jefe de Estado sirio, Ahmed Al-Shara, el próximo 10 de noviembre en Washington, en lo que sería la primera visita de un mandatario sirio a la Casa Blanca en décadas.

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