La cita tendrá varias ausencias, incluido el presidente Yamandú Orsi, a quien tocará la presidencia pro témpore de la Celac en 2026. “Fuerzas ajenas a la paz de América han querido que la cumbre Celac/Europa fracase”, manifestó en X el mandatario colombiano, Gustavo Petro, quien ocupa actualmente la presidencia pro témpore de la Celac y, por lo tanto, coorganiza la cumbre junto con el presidente del Consejo Europeo, António Costa.
En enero de 2024 la II cumbre de la Celac proclamo a Latinoamérica y el Caribe como zona de paz.
Por ello la nueva cita debe pronunciarse sobre el despliegue de buques de guerra de Estados Unidos frente a las cosas de Venezuela, un tema que el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva consideró obligatorio de tratar.
“Uruguay tiene clara su posición: hay que bajar todas las tensiones”, afirmó Lubetkin sobre el asunto.
No obstante las ausencias, el canciller uruguayo consideró que la cumbre será “extraordinariamente representativa”.
La defensa del multilateralismo es uno de los principales temas de la cumbre, además de la transición energética, la seguridad y la lucha contra el crimen organizado, el comercio y las iniciativas de inversión.
Para Lubetkin, “el menú es tan amplio que lo importante es sumar capacidades de dos regiones, que son fuertes, para poder trabajar en conjunto”.
“Más allá de los acuerdos que se pueden hacer sobre los temas de multilateralismo, paz, etcétera, yo creo que en el ámbito de la cooperación tenemos que ser muy concretos”, dijo a La Diaria.
“Veremos cuáles puntos concretos nosotros podremos impulsar durante la presidencia que tomaremos (en abril próximo)”, señaló el ministro al respecto.
Adelantó que su delegación mantendrá diversas reuniones bilaterales con el foco en dos bloques: los países del Caribe-principalmente el Caribe inglés–, de los que “nos habíamos alejado un poquito”, y los de la UE, de cara a la inminente aprobación del acuerdo comercial con el Mercosur.
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