El litigio se realizará en la sesión plenaria virtual y se extenderá hasta el 25 de noviembre.

Si el Supremo Tribunal Federal (STF) acepta los cargos de la Fiscalía General, el parlamentario, quien permanece en Estados Unidos desde febrero, será acusado y se abrirá una causa penal, al ser imputado por sus acciones en una potencia extranjera.

De acuerdo con el Ministerio Público Federal, el legislador buscó sanciones contra su país y las autoridades brasileñas, para interferir en el pleito sobre la tentativa golpista tras las elecciones de 2022 e impedir la condena de su padre.

Finalmente, el exmandatario ultraderechista fue penado a 27 años y tres meses de prisión por cinco delitos.

El primer juez en votar es el relator, Alexandre de Moraes. Los ministros Cristiano Zanin, Cármen Lúcia Antunes y Flávio Dino también forman parte del primer panel, el mismo que condenó a Bolsonaro, con la excepción del juez Luiz Fux, quien fue transferido a la segunda sala del STF.

Todos los magistrados de la corte, menos Fux, André Mendonça y Kassio Nunes Marques fueron sancionados por Estados Unidos. Estos dos últimos nombrados por Bolsonaro.

El descendiente de Bolsonaro ha admitido públicamente en varias ocasiones haber orquestado las sanciones contra las autoridades nacionales.

Se atribuyó la responsabilidad, por ejemplo, de la aplicación de la Ley Magnitsky contra De Moraes, la cual sanciona a funcionarios extranjeros en todo el mundo por violaciones de derechos humanos o corrupción, autorizando congelamientos de activos y prohibiciones de ingreso a Estados Unidos.

La Fiscalía General también acusó al creador digital de contenidos Paulo Figueiredo de coacción al sistema judicial.

El diputado y el bloguero amenazaron a las autoridades judiciales y a otros poderes del Estado con obtener sanciones de las autoridades norteamericanas.

Lo anterior, si el proceso penal no tenía el resultado deseado o si la amnistía, extendida necesaria y principalmente a Bolsonaro padre, no era aprobaba en el Congreso Nacional.

Mensajes revelan que el legislador instruyó a su progenitor sobre el momento y el contenido de sus declaraciones públicas, según la Fiscalía General.

«Si dices algo sobre Estados Unidos que no encaje con lo que estamos haciendo aquí, podrías echar por tierra algunas acciones», le dijo el congresista a Bolsonaro en uno de los diálogos encontrados por la Policía Federal. La investigación condujo al arresto domiciliario del exgobernante.

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