Según reportes de los medios de prensa oficiales, 14 procesados comparecieron ante el tribunal, entre ellos exmilitares del antiguo ejército sirio y también miembros del actual Ministerio de Defensa. Las audiencias fueron aplazadas para los días 18 y 25 del próximo mes.

El juez presidente Zakaria Bakkar sostuvo que los procedimientos se desarrollan bajo criterios nacionales, imparciales e independientes, en conformidad con el Código Penal sirio.

Precisó que los imputados enfrentan cargos de sedición, incitación a la guerra civil, liderazgo de bandas armadas, ataques contra las fuerzas del orden, asesinato, saqueo y sabotaje.

Dos días antes, la Comisión Nacional encargada de la investigación anunció que los juicios por los abusos y violaciones registrados en el Litoral se celebrarían de manera pública.

Por su parte, el portavoz de la referida entidad, Yasser Al-Farhan, informó que 298 personas acusadas de ataques contra civiles y 265 señaladas de agresiones contra el personal de seguridad pública fueron remitidas a la justicia.

La Comisión había presentado sus conclusiones al presidente sirio Ahmed Al-Shara durante una conferencia de prensa celebrada el 22 de julio, en la cual se detallaron los sucesos ocurridos en marzo en la costa siria.

Durante varios días de ese mismo mes, la región vivió intensos enfrentamientos tras ataques perpetrados por grupos armados de ex militares contra la fuerzas de seguridad. Las autoridades retomaron el control mediante una operación a gran escala, en la que participaron facciones y que estuvo marcada por violaciones generalizadas, incluyendo asesinatos de civiles, saqueos e incendios. De acuerdo con la Red Siria para los Derechos Humanos, entre el 6 de marzo y el 16 de abril de 2025 se documentó el asesinato de mil 662 personas.

Tras los sucesos, el presidente Ahmed Al-Shara dispuso la creación de una comisión investigadora destinada a esclarecer las causas de la violencia y las violaciones cometidas contra civiles y miembros de las fuerzas de seguridad.

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