Sin embargo, el presidente Rodrigo Paz aseguró que falta por recorrer un camino largo en un país al que describió como “hecho trizas”.

“En 12 días estamos recuperando esa institucionalidad que el pueblo de Bolivia demandaba y que perdió durante los últimos siete mil 300 días bajo el mandato del Movimiento al Socialismo (MAS). 12 días contra siete mil 300 (…). Ahora más que nunca necesitamos una institucionalidad útil y de servicio público”, aseguró Paz en un contexto de reiteradas críticas a todo lo realizado por las administraciones de las últimas dos décadas.

De acuerdo con lo prometido durante la campaña electoral, Paz eliminó este jueves el Ministerio de Justicia, con lo que, según afirmó, acabó la persecución judicial y la injerencia política en la justicia.

En su intervención, asimismo, también honró sus compromisos de resolver la falta de carburantes y estabilizar la cotización del dólar.

“Los primeros 12 días nos propusimos el reto de cumplir las tres promesas principales de nuestra propuesta de campaña: normalizar la provisión de combustibles, estabilizar el dólar y cerrar el ministerio de la persecución”, dijo.

Reiteró en sus redes sociales que, tras 12 días de Gobierno, “cumplimos”.

En referencia a la clausura de la cartera de Justicia, un comunicado de la oficina presidencial consideró que “esa decisión (…) reafirma su compromiso con un Estado verdaderamente democrático, basado en la independencia de poderes, el respeto a las libertades y la defensa irrestricta de los derechos humanos”.

Según Paz, la cartera de Justicia está muerta y con ello se acaba la persecución y la injerencia política en esa esfera.

Desde el Tribunal Supremo de Justicia (TSE), su decana, Rosemery Ruiz, afirmó que este es un paso firme para la reforma judicial.

“Saludamos este paso firme a la independencia judicial, ahora sí el ciudadano boliviano podrá creer en una justicia transparente que no esté sometida al calor político”, concluyó.

La disolución de la cartera de Justicia tuvo lugar este jueves tras la destitución del extitular de ese ministerio Freddy Vidovic y su reemplazo por Jorge García, mediante el decreto 5491.

Vidovic fue defenestrado a 11 días de su juramentación, en un contexto de públicas contradicciones entre el mandatario Paz y el vicepresidente del Estado, Edman Lara.

Tras un papel decisivo de Lara en la conquista de los votos presidenciales, Vidovic fue su única propuesta que integró el gabinete ministerial juramentado el 9 de noviembre último.

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