Según un informe del emisor estatal, esa variación acumulada del índice mensual de actividad económica (IMAE) está alineada con el parámetro de crecimiento económico establecido en la revisión del Programa Monetario 2024-2025.

El IMAE es un indicador que mide los principales sectores de la actividad económica de un país y es utilizado para la toma de decisiones de inversión.

La expansión del Producto Interno Bruto (PIB) hasta septiembre responde al fortalecimiento de la demanda interna, especialmente del consumo -apoyado mayores ingresos de los hogares y un flujo sostenido de remesas-, así como a la demanda externa de productos agroindustriales.

Otro de los factores determinantes en el crecimiento sostenido de la producción nacional fue la desaceleración de la inflación, subrayó el BCH.

Entre los sectores con mayor aporte al PIB sobresalieron la intermediación financiera, telecomunicaciones, agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, transporte y almacenamiento, industria manufacturera y comercio, detalló la autoridad monetaria hondureña.

El BCH señaló que la evolución positiva en servicios de correo y telecomunicaciones respondió al incremento en la adopción de soluciones digitales por parte de hogares y empresas, reflejado en una mayor demanda por conectividad y servicios de internet.

Los mayores ingresos por intereses y comisiones explicaron el desempeño positivo de la intermediación financiera, apoyada por un aumento en el crédito al sector privado, especialmente para actividades comerciales, consumo y servicios de transporte y telecomunicaciones.

El fortalecimiento del comercio exterior y la actividad productiva impulsaron los servicios de transporte, registrándose un alza en el flujo terrestre y marítimo de mercancías desde los principales puertos y zonas logísticas del país, de acuerdo con los datos oficiales.

La industria manufacturera se mantuvo en expansión desde marzo de 2025, destacando la elaboración de alimentos, la fabricación de arneses automotrices, la producción de varilla, cemento y bienes de hormigón, rubros que continuaron aportando de forma estable al sector, agregó el reporte.

A pesar de los complejos entornos globales, como la creciente incertidumbre, la disminución de la demanda externa y las condiciones climáticas adversas, la economía hondureña creció 3,9 por ciento en 2024.

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