«El Gobierno está mortificando al país con ideas extrañas y tenemos la obligación de impedírselo», sostuvo y advirtió: «Esto es iniciar una situación de violencia en la sociedad, cuando ya sabemos la vida que ha tenido Argentina con los golpes de Estado, con las dictaduras y con todo lo que hemos sufrido».
El 10 de enero de 2024, a pocos días de la asunción de Javier Milei, Presti ocupó la jefatura del Estado Mayor General del Ejército, lo que provocó el pase a retiro de 22 generales en actividad, mayores que él, recordó la agencia Noticias Argentinas.
Con anterioridad, fue jefe del Regimiento de Asalto Aéreo 601, comandante de la IV Brigada Aerotransportada y director del Colegio Militar y estuvo presente en misiones de paz en Haití. Desde 2015 a 2017, fue agregado de la Embajada Argentina en Guatemala con extensión sobre El Salvador, Honduras y Nicaragua.
Dos exministros civiles de Defensa, Agustín Rossi y Jorge Taiana, ambos hoy diputados nacionales electos que asumirán el 10 de diciembre, también alertaron sobre su designación: «Las FFAA son usadas para continuar el ajuste», consideró el primero.
Agregó que «es un enorme retroceso para la democracia argentina y para las Fuerzas Armadas como institución de la República», escribió en redes sociales.
«En Argentina, a lo largo de más de 40 años, logramos consolidar la conducción política de la defensa bajo la dirección del poder civil. Con esta designación las Fuerzas Armadas quedan involucradas en el destino del gobierno, cuando deberían ser preservadas de cualquier circunstancia política», opinó el extitular de Defensa.
Y concluyó: «Milei paga salarios de hambre al personal militar y Luis Petri (el anterior ministro) destruyó la obra social de los militares afectando las prestaciones de salud de toda la familia militar».
Por su parte, Taiana sostuvo que «la conducción civil de las FFAA es un consenso democrático de más de 40 años. Nombrar a un militar como ministro de Defensa implica la utilización partidaria de las cuerpos militares, haciéndolos parte de las decisiones políticas de un gobierno que ha renunciado a la defensa de la soberanía».
Noticias Argentinas señaló que trascendió también el repudio de la agrupación H.I.J.O.S. Capital, que apuntó que el padre del flamante ministro, Roque Carlos Presti, estuvo acusado por delitos de lesa humanidad cometidos en el período 1976-1983.
También, el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos manifestó su repudio en un comunicado y consideró que “este hecho constituye un grave retroceso en uno de los pilares fundamentales de nuestra democracia, que buscó terminar con la influencia castrense en la vida política tras la última y sangrienta dictadura cívido-militar-empresarial”.
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