La OMM divulgó en su sitio oficial una declaración de su secretaria general, Celeste Saulo, quien resaltó que la COP celebrada en Belém, Brasil, muestra avances y peligros.

No obstante, la OMM acogió con satisfacción el compromiso reafirmado con el multilateralismo y las soluciones negociadas a desafíos que son demasiado grandes para que los países los afronten solos.

De particular importancia -dijo- es el llamado a las naciones para que tripliquen el financiamiento para la adaptación a fin de ayudarlas a prepararse para impactos climáticos y meteorológicos más extremos que devastan comunidades y perturban las economías nacionales y las cadenas de suministro globales.

Ahora, más que nunca, debemos convertir las promesas en realidad. Nuestro objetivo de «Alertas Tempranas para Todos» no es un lujo, sino un salvavidas: cada dólar invertido en sistemas de alerta puede evitar muchas más pérdidas humanas y económicas, dijo Saulo.

Estamos progresando, pero necesitamos ir más lejos y con mayor rapidez para subsanar las deficiencias de observación y datos, y ampliar la capacidad de alerta temprana en las regiones más vulnerables, acotó.

“Fue una COP de la Verdad y debemos ser realistas: estamos muy lejos del buen camino”, apuntó.

La actualización del estado del clima de la Organización Meteorológica Mundial muestra que 2025 será el segundo o tercer año más cálido jamás observado.

Las concentraciones de gases de efecto invernadero, que retienen el calor, alcanzan su nivel más alto en 800 mil años, lo cual condena a nuestro planeta a un futuro más cálido y peligroso.

El aumento récord de los niveles de gases de efecto invernadero significa que será prácticamente imposible limitar el calentamiento global a 1,5 grados en los próximos años sin sobrepasar temporalmente el objetivo del Acuerdo de París.

Es esencial que las temperaturas vuelvan a bajar 1,5 grados para finales de siglo y que el sobrepaso temporal sea lo más pequeño, breve y seguro posible, destacó la OMM.

Dicha agencia especializada de la ONU mantiene su compromiso de proporcionar los conocimientos científicos necesarios para contribuir a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y dotar a los países de las herramientas y los conocimientos necesarios para hacer frente al cambio climático.

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