Precisamente, el jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez, al recibir hoy en el Palacio de la Moncloa al presidente de Alemania, Franz-Walter Steinmeir, agradeció la visita que realizará mañana a Gernika, País Vasco.

Un gesto de enorme fuerza simbólica, destacó Sánchez, que según se anunció, persigue honrar a las víctimas del bombardeo del municipio por la aviación nazi y fascista italiana en 1937.

El partido vasco EH Bildu ya adelantó que no participará en los actos que este viernes en la localidad vizcaína ante lo que consideró «la hiriente» presencia del Rey Felipe VI, a quien exige pida perdón.

Un comunicado difundido por la organizaciób vasca, remarcó que «el pueblo de Guernica fue bombardeado en 1937 por la Legión Cóndor alemana, en connivencia con el régimen franquista y con el beneplácito de Francisco Franco (…)”.

«Las heridas de aquel bombardeo -que tenía como objetivo último la humillación del pueblo vasco y atacar su corazón simbólico- siguen aún abiertas, si bien aplaudió el gesto del mandatario germano, “un paso en la buena dirección; y estas muestras de cercanía hacia las víctimas del bombardeo son bienvenidas».

Sin embargo, EH Bildu consideró que el Estado español «sigue sin asumir la responsabilidad que le corresponde respecto al bombardeo de Gernika, porque de esta forma se contribuyó a construir el régimen franquista, que a su vez reinstauró la monarquía borbónica de la que el rey Felipe VI es heredero”.

Al margen, Sánchez ponderó la “buena sintonía” de las relaciones bilaterales con Alemania y la solidez de la cooperación económica basada en los flujos comerciales y las inversiones.

Las interconexiones energéticas, la industria de defensa, simplificación y agenda climática; el repudio a los extremismos; la memoria democrática; la situación geopolítica y los conflictos en Ucrania y Oriente Medio, fueron temas abordos por los dos dirigentes.

El presidente del Gobierno español alabó la fiabilidad de su país como socio estratégico en el ámbito de la industria de defensa, lo cual tambiñen abre nuevas oportunidades de inversiones de la nación ibérica a partir del auge del sector en suelo germano.

En particular, Steinmeier subrayó la importancia de que España y Alemania estrechen aún más su colaboración en ámbitos como la política de seguridad, como firmes pilares de Europa y frente a los vientos de extremismos y polarización que abundan actualmente en el mundo.

Durante un discurso ayer en el Congreso de Diputados de España, Steinmeier fustigó las tendencias actuales que intentan minar el proyecto europeo, con «tentaciones autoritarias» que encuentran eco en muchos sectores de la población con falsas promesas, en especial entre los jóvenes.

Los cimientos de la democracia y libertad en Europa están siendo sacudidos también por la guerra en Ucrania, opinó.

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