Según detalló el funcionario, todos los precursores químicos utilizados para la elaboración de esa sustancia quedan oficialmente cancelados, prohibidos y bajo control estricto en el territorio nacional.
“Con esta medida contundente, el Gobierno del presidente Gustavo Petro deja claro que Colombia no permitirá la fabricación de fentanilo ni que el país sea utilizado como corredor para exportarlo”, refirió.
La decisión, adoptada durante una sesión del Consejo Nacional de Estupefacientes, especifica además que los componentes usados para la obtención del opioide serán sometidos a vigilancia reforzada para evitar su desvío hacia actividades criminales.
Se conoció además que en la próxima semana se radicará en el Congreso de la República un proyecto de ley que penaliza el ingreso, porte, distribución, almacenamiento y exportación de fentanilo, con el objetivo de cerrar cualquier vacío normativo que facilite su proliferación.
Según el ministro de Justicia Andrés Idárraga, se tomarán las medidas pertinentes para impedir que en el país se instalen cocinas de producción de la droga o que se emplee al territorio como plataforma para el crimen internacional.
El fentanilo es un potente opioide sintético que se utiliza legalmente en medicina como analgésico y anestésico para tratar el dolor intenso, pero que se vuelve adictivo y letal cuando se usa de forma ilegal debido a su alta potencia y riesgo de sobredosis.
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