Tras una primera edición que en 2024 reunió en Sao Paulo a representantes de 11 países, el Seminario Latinoamericano de Comunicación llega a su segunda con una agenda ampliada y centrada en retos concretos.

El programa contempla presentaciones de experiencias exitosas de comunicación contrahegemónica, talleres destinados a medios independientes y comunitarios, y debates sobre estrategias para disputar narrativas ante el auge de la desinformación y los discursos de odio.

Organizaciones y comunicadores de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, China, Colombia, Estados Unidos, México, Uruguay y Venezuela participarán en las sesiones de intercambio, concebidas para fortalecer vínculos regionales y sedimentar una agenda común de trabajo.

Los organizadores señalan que el ecosistema de la comunicación en América Latina enfrenta un doble cerco: por un lado, la histórica concentración de los medios tradicionales, por otro, el avance de plataformas tecnológicas que operan con algoritmos opacos y modelos de negocio que condicionan la circulación de contenidos.

Este escenario, advierten, limita el pluralismo, impone barreras económicas y afecta de manera directa a proyectos comunitarios, populares e independientes.

Frente a ese panorama, el seminario plantea la integración regional como una respuesta estratégica para proteger el derecho a la información y promover un modelo comunicacional más democrático.

La construcción de redes entre colectivos audiovisuales, iniciativas sindicales, universidades y medios alternativos busca generar capacidades compartidas y articular respuestas comunes a desafíos que afectan a toda la región.

Para los organizadores, la apuesta es avanzar hacia una soberanía comunicacional capaz de disputar sentidos, producir contenidos desde los territorios y afirmar el derecho de los pueblos latinoamericanos a decidir su propio destino informativo.

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