Trump informó en un mensaje a las tropas estadounidenses por el Día de Acción de Gracias sobre el fallecimiento de una de las víctimas del atentado, la especialista Sarah Beckstrom, de 20 años, mientras el sargento Andrew Wolfe, de 24, aún lucha por su vida.

Rahmanullah Lakanwal, un ciudadano afgano de 29 años, fue identificado por el FBI como el presunto autor del ataque a tiros contra los dos efectivos que patrullaban el popular centro de la ciudad, un área que, además, muy concurrida por turistas.

Medios locales publicaron que Lakanwal ingresó a Estados Unidos en septiembre de 2021 y residía en el estado de Washington, desde donde se trasladó conduciendo hasta aquí.

Ahora Lakanwal enfrenta un cargo de asesinato en primer grado luego de la muerte de una de las víctimas, declaró la víspera la fiscal federal Jeanine Pirro.

Como consecuencia de este acto terrorista, como lo calificó Trump, la administración republicana dio de inmediato una vuelta de tuerca a la ya agresiva agenda migratoria.

Las tarjetas de residencia o “green cards” emitidas a personas de 19 países que Washington considera “de preocupación”, serán reexaminadas.

Por mandato de Trump “he ordenado una reexaminación exhaustiva y rigurosa de todas las ‘green cards’ permanentes a todos los extranjeros de todos los países considerados ‘de preocupación’”, escribió Joe Edlow, director del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos, en una publicación la víspera en la red social X.

En esa lista figuran, entre otros, Afganistán, Cuba, Haití, Irán, Somalia, Libia, Sudán, Yemen y Venezuela.

El presidente ordenó el despliegue de 500 soldados adicionales de la Guardia Nacional aquí, en parte, para ayudar en los esfuerzos de deportación masiva de su administración.

“Esta atrocidad nos recuerda que nuestra mayor prioridad en materia de seguridad nacional es asegurar el control total sobre las personas que entran y permanecen en nuestro país”, declaró Trump. “En su mayoría, no las queremos”, acotó.

Destacaron los medios que, en lo inmediato, la Casa Blanca suspendió todas las solicitudes de inmigración de ciudadanos afganos.

El Gobierno de Trump dice que el sospechoso llegó bajo el programa «Operación Aliados Bienvenidos» de Joe Biden, diseñado para apoyar a los refugiados de ese país vulnerables después de la retirada de las tropas estadounidenses de la nación centroasiática en 2021.

Elementos de la Guardia Nacional de varios estados fueron desplegados en la capital por orden de Trump desde agosto -pese al rechazo que ocasionó la medida-, en una controvertida ofensiva contra el crimen que se ha extendido a otras ciudades del país.

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