El drama de 82 minutos producido por Cuba, Guatemala y México aborda la diversidad corporal, a partir de la historia de un bailarín homosexual obeso que ama el ballet clásico. La obsesión que siente por un joven guardia de seguridad busca aplacar su sed de amor.
El título de la película responde a un juego entre la palabra chéri en francés, que significa querido, y cherry en inglés, asociada a la cereza y al físico del personaje protagónico.
Fabián Suárez, guionista y director del largometraje concibió el relato tras conocer al bailarín y coreógrafo Juan Miguel Mas, director de la compañía Danza Voluminosa, quien ha dedicado sus espectáculos a mostrar las capacidades físicas y creativas de las personas con sobrepeso por medio del lenguaje danzario.
Juan ha incursionado en varias producciones cinematográficas del realizador, quien lo seleccionó como protagonista del guion al que sirvió de inspiración.
Dentro del numeroso elenco de la película intervienen Noslen Sánchez, el actor guatemalteco ya fallecido Roberto Díaz, y el cuerpo de baile de la compañía Danza Voluminosa.
En su filmografía, Suárez reúne los cortometrajes Kendo Monotagari (2012) Mención especial del Festival Internacional de Cortometrajes Clermont-Ferrand, Fiodor en el fiordo (2014), y el largometraje Caballos (2015), este último merecedor del Premio a la Mejor Ficción de la XV Muestra de jóvenes realizadores de Cuba.
«Cherri habla de amores fallidos, de segundas oportunidades. Para mí era muy importante hablar de los cuerpos y de cómo la sociedad los valora. Mi propósito es provocar fricciones sobre temas que la sociedad cubana tiene pendientes», explicó el guionista y director en declaraciones a Prensa Latina.
Acerca de la realización, Suárez señaló que intentaron crear momentos mágicos que contrastan con la dureza de otros pasajes, por lo que junto al director de fotografía Javier Labrador buscaron una imagen más colorida.
El diseño sonoro es responsabilidad de Velia Díaz y en la composición de la música original tomaron parte Héctor Téllez junior, con la participación del contrabajista Gastón Joya.
Cherri defiende el derecho al amor mediante un discurso fílmico que desafía encasillamientos, prejuicios y promueve el respeto hacia las corporalidades diversas.
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