“La maquinaria imperial estadounidense con su tradicional doctrina intervencionista pretende justificar una eventual intervención armada bajo el gastado pretexto de una supuesta lucha contra el narcotráfico y la construcción imaginaria del denominado ´Cartel de los Soles´”, afirma el comunicado.
Advierte el texto entregado a Prensa Latina que esa narrativa que incluso organismos internacionales descartan, constituye la nueva excusa con la que Washington encubre su verdadera intención: la apropiación ilícita del petróleo, el oro, el gas y la vasta riqueza natural que poseen el suelo y el pueblo venezolanos.
Al recordar que esa fórmula ya se aplicó en países después caotizados como Libia, Iraq y Afganistán con argumentos mentirosos, el documento critica que ahora intenten reproducir esa misma estrategia contra un país latinoamericano cuya única “falta” es mantener un proyecto histórico de soberanía e independencia antimperialista.
Describen los antifascistas que la arremetida contra Venezuela incluye la operación militar, la guerra psicológica y mediática, la agresión económica, el cerco diplomático y más recientemente el ciberataque contra el control de su espacio aéreo.
Deploran que Estados Unidos ha emitido desde 2014 miles de sanciones unilaterales, ilegales y criminales contra el pueblo venezolano, secundados por la Unión Europea y otros acólitos, que golpean su economía y han dificultado el acceso a alimentos y medicamentos necesarios para enfrentar males como la pandemia de Covid-19.
Subraya que estas represalias obstruyen la adquisición de insumos industriales y las operaciones financieras internacionales, sin que ninguna haya logrado doblegar la dignidad de un pueblo que lucha dignamente contra todo esto.
Los antifascistas bolivianos señalan que todo este arsenal constituye un castigo colectivo prohibido por el derecho internacional, cuyo objetivo es quebrar la voluntad política de un país, negado a obedecer las órdenes del hegemón imperial.
“La Internacional Antifascista, capítulo Bolivia, declara su más enérgico repudio a esta política intervencionista, decadente y desesperada, propia de un imperio que ya no puede sostener su hegemonía sin recurrir a la violencia”, reafirma el texto.
Desde la Internacional Antifascista capítulo Bolivia «expresamos nuestra solidaridad inquebrantable con el pueblo venezolano, con su gobierno constitucional y con su legítimo presidente, Nicolás Maduro Moros”, concluyen los activistas solidarios.
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